Desde tiempos remotos el hombre ha buscado la forma de hacer ciencia, de conocer todos los detalles de su alrededor y de su existencia propia; así pues, los científicos también se han dedicado, a utilizar todos estos conocimientos para mejorar la calidad de vida. El avance de la tenología crece a pasos agigantados, pues hemos pasado en cuestión de años a las computadoras ultradelgadas, la nanomedicina, los rayos X, los simuladores en 3-D, la pregunta es: ¿hasta dónde podemos llegar?
Como futura científica, espero poder llegar a utilizar mis conocimientos para mejorar la calidad de vida del ser humano, el problema no es hasta dónde podemos llegar, sino es ¿a qué costo?. Citando al Dr. Wesche "sí se puede hacer, hay que hacerlo" la revolución tecnológica es inmensa, y las aplicaciones infinitas. Un ejemplo de ello podemos observar en los famosos GenPets.
Los GenPets retan ser mascotas modificadas genéticamente con apariencia de "humaniodes" o pequeños bebés humanos. Estas "mascotas" se encuentran diseñadas específicamente para satisfacer las necesidades de un niño que desea una mascota así también como la necesidad de los padres que no cuentan con el tiempo para hacerse responsable de una mascota, como lo es la alimentación diaria, la limpieza tanto del animal como de sus desechos y a la atención y compañía todo el tiempo. Estas mascotas son alimentadas una vez a la semana y sus desechos son mínimos. Durante el tiempo que se encuentran en la tienda esperando ser comprados, estos animales se encuentran empaquetados e inducidos en una especie de hibernación bajo inyección de ciertas enzimas que son conocidas por producir este efecto en los osos polares, por mencionar algunos ejemplos.
Sin embargo, investigando un poco más, el lector puede encontrar en otras fuentes que los GenPets son una obra de arte hecha por el escultor Adam Bradejs en un intento por observar la reacción de los seres humanos a la creación de este tipo de mascotas y su respuesta a los nuevos retos que encara la bioingeniería.
La respuesta se ha encontrado dividida a lo largo de todas las partes del mundo en donde se ha visto esta exposición. Gente golpeando los vidrios para protestar mientras niños llorando con tal de poder obtener esta mascota exótica. ¿Cuál es la realidad? La realidad no dista mucho de las fantasías de Adam, pues es claro que las investigaciones alrededor de las mutaciones, clonaciones y creación de "quimeras" ya se encuentra muy avanzada. El objetivo de los grandes científicos y compañías es el crear animales que nos ayuden a tener nuevos tratamientos de cáncer, que tengamos un modelo cada vez más parecido a nosotros para la prueba de cosméticos y farmacéuticos y que busquemos la manera de crear in vivo (pero sin peligro para los humanos) hígados, córneas, pulmones para transplantes humanos. Pero ¿es realmente ético la creación de animales híbridos, de creación de mutaciones para nuestra diversión como mascotas? Pienso que la bioingeniería es una rama de la ciencia muy importante pues gracias a ella hemos hecho muchos descubrimientos e invenciones, pero siento que se debe de enfocar más en el objetivo mismo de todas las ciencias: la obtención del conocimiento y el desarrollo de tecnologías para mejorar la calidad de vida de los seres humanos, el planeta Tierra y el resto de los seres vivos con los que compartimos el medio ambiente, no en diseñar seres vivos mutados genéticamente para nuestra diversión o con el sólo hecho de querer evitar nuestras responsabilidades, pues a final de cuentas, son seres vivos que no han decidido su futuro y tienen derecho a respeto hacia sus vidas.
Finalmente, en una serie de blogs que comentaban el mismo problema con los GenPets observé que muchas personas simplemente se daban por vencidas diciendo que así es la evolución, ese es el rumbo que están tomando las nuevas tecnologías y que había que adaptarse; y ese es el problema que más miedo nos debe inspirar de todo esto; no es lo qué hacemos, ni el costo que tomamos para la realización de todos estos experimentos, mucho menos la falta de respeto y ética; más bien, el problema es que la sociedad se queda callada, piensa que ese es el rumbo de la evolución y no se puede hacer nada. La sociedad misma es la responsable, pues tiene el deber de levantar la voz y de lograr que aunque existan personas y empresas que a cualquier costo busquen la creación de animales hibridos para venderlos como mascota y generar una ganancia económica importante para ellos, también existen personas que creen en la parte ética y puedan apelar por el derecho a la vida.
http://health.usnews.com/usnews/health/articles/010122/archive_006752.htm
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